Reciclado vs upcycling: ¿cuál es más efectivo para el Planeta?
Una nueva investigación apunta a los beneficios del»upcycling» frente al reciclaje plástico en lugar de hace para mantenerlo fuera de las vías fluviales.
Los hallazgos publicados en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences sugieren un cambio importante en la forma en que vemos el manejo de los desechos plásticos.
El trabajo de investigación, «Complejos funcionales de enzimas y polímeros», fue dirigido por un equipo de la Universidad Northwestern y apoyado por la Oficina de Ciencias Básicas de la Energía del Departamento de Energía de EE. UU. Por Jill Ettinger
Los hallazgos concluyen que el upcycling puede mejorar significativamente las tasas globales de recuperación de plástico al mismo tiempo que proporciona un componente de eliminación de desechos.
Actualmente, menos del diez por ciento de los productos de plástico se reciclan correctamente, si es que se pueden reciclar. Los investigadores dicen que, en lugar de impulsar un mayor reciclaje, los beneficios del upcyling, esto es descomponer los plásticos al deconstruir y reconstruir sus polímeros podrían ser significativamente más efectivos. Esto, dice el equipo de investigación, impulsará avances en biotecnología, biorremediación y medicina.
Reciclaje vs Upcycling
Según la investigadora de Northwestern y autora principal del estudio, Mónica Olvera de la Cruz, el reciclaje expone el plástico al calor antes de descomponerlo en plástico de peor calidad, mientras que hacer upcycling y recuperar para reformar los polímeros, el producto final puede ser incluso más resistente que su predecesor.
“La gente ha descubierto una enzima, una bacteria que come poliéster para sobrevivir y lo convierte en unidades monoméricas”, dijo Olvera de la Cruz. “Pero no han podido usarlo porque se descompone a cierta temperatura. Nuestra idea era construir polímeros capaces de encapsular la enzima para proteger su estructura, de modo que pueda continuar funcionando fuera de las células vivas y en el laboratorio a temperaturas suficientemente altas para poder descomponer el PET”.
El equipo de Olvera de la Cruz utilizó una enzima que se puede sintetizar en un laboratorio y procesar sin usar solventes. El descubrimiento también podría ayudar a impulsar soluciones para eliminar microplásticos de ríos y océanos, dice el equipo de investigación.
El equipo diseñó un polímero que es capaz de resistir el calor sin desmoronarse. Incluye un componente hidrofugante así como elementos que actúan con las partes activas de la enzima.
“Descubrimos que si junta el complejo del polímero con la enzima, y lo acerca a un plástico, y luego lo calienta ligeramente, la enzima podía descomponerlo en pequeñas unidades monoméricas”, Olvera de la Cruz. dijo. “Además de operar en un entorno como el que podría limpiar microplásticos, nuestro método ha protegido contra la degradación a alta temperatura, y un estudiante pudo realizar la prueba”.
Los investigadores dicen que descubrir una forma de proteger la enzima del calor podría permitir la encapsulación de microplásticos para crear un agregado.
“Se puede hacer un nuevo polímero con las unidades monoméricas”, dijo Olvera de la Cruz. “Estas son cosas peligrosas que son malas para nuestra salud. No necesitamos hacer más. Puede reutilizar los que ya están aquí para hacer un plástico igualmente bueno, o mejor”.
Política de plástico
Los hallazgos se producen después de que las naciones miembros de la ONU acordaran el mes pasado una resolución global destinada a reducir los desechos plásticos.
“Este es el acuerdo multilateral ambiental más importante desde el acuerdo de París”, dijo Inger Andersen, directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. “Es una póliza de seguro para esta generación y las futuras, para que vivan con el plástico y no se vean condenados por él”.
Casi 11 millones de toneladas métricas de plástico terminan en ríos, lagos y océanos cada año. Los expertos sugieren que a este ritmo, el plástico superará en número a los peces en los océanos del mundo a mediados de siglo.
La producción de plástico es responsable de al menos el cinco por ciento de todas las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Estados Unidos es el mayor productor de plástico del mundo, con aproximadamente 287 libras de plástico por persona
